Bajo el mar
Bajo el mar, bajo el mar
Hay siempre ritmo en nuestro mundo al natural... que diría Sebastián.
Hace unas semanas estuvimos en Tossa, pasando el fin de semana, y aprovechamos para hacer un bautizo de submarinismo. Es algo que yo tenía muchas ganas de hacer desde hace tiempo, pero que por un motivo u otro había ido quedando siempre postergado (como el puenting...)
La escuela de submarinismo donde hicimos el bautismo estaba muy bien. El pequeño curso teórico que te tienen que dar fue para nosotros casi un monólogo del Club de la Comedia, y los instructores que nos acompañaron en el bautizo nos trataron muy bien.
Estuvimos poco rato, y tampoco bajamos muy profundo (6 o 7 metros); así que a pesar de que tuvimos mucha suerte con el día, el agua estaba clara y la visibilidad era muy buena, apenas vimos 'bichos'.
Algo que me hizo mucha gracia - y es una tontería, pero los de secano somos así - es cuando los instructores nos fueron pasando un erizo... que por debajo son suavecitos, y tienen unas patitas con ventosas.
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